ARTÍCULO "CRISIS EN MASCULINO"

"Os dejo un artículo de Concha Caballero, que publica en el Correo de Andalucía, y me parece bastante bueno. Esta mujer fue portavoz del Grupo parlamentario de IU-Convocatoria por Andalucía-Los Verdes, en la pasada legislatura en el parlamento andaluz. A mí me encanta, siempre suele ser bastante acertada en sus opiniones."



Escalofríos me dan de pensar que las aguas grises de la crisis se lleven con ellas las conquistas de las mujeres en los últimos años. Lo digo porque, seguramente sin ningún tipo de acuerdo o de intención expresa, la información económica se viene escribiendo en masculino en estos últimos meses. La crisis ha barrido el recién aprendido lenguaje correcto de género y casi todos los informativos hablan de “los parados” en masculino. Las imágenes que acompañan estas informaciones suelen nutrirse de empresas o sectores fuertemente masculinizados en el que las mujeres no pueden ser despedidas, simplemente porque nunca se les dejó entrar.

En muchos foros se habla del problema de las familias, con el estándar clásico que ha sido superado por la vida y se recupera el concepto de “cabeza de familia” con un cierto sentido de jerarquía o, al menos, de prioridad. No digamos ya cuando se refieren a “los padres de familia” o a los “parados con corbata” (no con traje o con maletín sino con el aditamento típicamente masculino) como el reflejo de la nueva realidad.

A este lenguaje se suma la aparición de un interminable desfile de expertos economistas,- hombres en su casi totalidad-, en las pantallas y tribunas de los medios de comunicación y que, en su aparente asepsia analítica, no manejan las variables de género.

De esta forma se está construyendo un imaginario de la crisis económica absolutamente masculinizado que es, además, completamente falso. Es necesario recurrir a los datos estadísticos para desmontar esta imagen: en Andalucía el desempleo masculino se sitúa cerca del 22 por ciento, mientras que el femenino alcanza casi el 27 por ciento. O sea, que en caso de otorgar género al paro, por desgracia, se escribiría en femenino.

Este “error” extendido de la masculinización del paro, viene acompañado de otro igualmente falso: el mayor número de personas desempleadas no pertenecen a la construcción, ni a las actividades industriales, sino al sector servicios que es, además, el que representa el mayor peso en nuestra comunidad. Un último dato para completar el cuadro: hay muchas más mujeres demandantes de empleo que hombres. La diferencia estriba en que no son despedidas porque nunca con anterioridad han tenido un puesto de trabajo. La crisis está provocando efectos terribles en las mujeres: aquellas que tienen una elevada preparación, tras haber superado siglos de postergación, ven como el mercado laboral les corta las alas aún antes de haber podido volar; para otras, se ha multiplicado el trabajo no declarado, la ausencia de derechos y la imposibilidad de negociar sus condiciones laborales. Finalmente, las mujeres paradas cobran menos dinero y su seguro de desempleo abarca menos meses que sus congéneres masculinos, pero nada de esto se cuenta.

El desempleo es un drama sea cual sea el género de la persona que se encuentra en esta situación y al sector al que pertenezca, pero deberían encenderse las luces rojas de alerta cuando, subrepticiamente, se minimiza el desempleo femenino y se escriben en masculino los efectos de la crisis, en un mercado laboral que todavía no ha aprendido a hablar el lenguaje de la igualdad, como demuestran las diferencias salariales de las mujeres, la alta precarización del empleo femenino y las dificultades para su ascenso profesional. Alguien debería explicárselo a los selectos foros económicos y a los clubs de banqueros y presidentes de Cajas, -todos ellos casualmente hombres- que miran desde la distancia, con su mente encorbatada y embutidos en el uniforme oscuro de las viejas ideas.

En efecto Raul, muy acertado el artículo.

Gracias por publicarlo.

Un beso

Un millón de gracias Raúl.


Magnifico articulo de Concha Caballero. Siempre en las crisis sufrimos los más débiles.

Un saludo Melita

Muchas gracias Raúl, es muy bueno. Por cierto...

"Finalmente, las mujeres paradas cobran menos dinero y su seguro de desempleo abarca menos meses que sus congéneres masculinos, pero nada de esto se cuenta"

ESO ES CIERTO?????

Valle, es cierto en parte. Ganan menos en la prestación por desempleo, porque generalmente la base de cotización de la mujeres suele ser más baja, sobre todo si los trabajos son "femeninos". Entonces, el desempleo que se percibe, es el calculado en razón del salario que cobraste cuando trabajaste.
Y por otra, parte dura menos?, Pues me temo que sí, que dura menos, porque la mujer en la mayoría de los casos se incorporó más tarde al mercado laboral remunerado, y como sabrás se cobra tanto tiempo de paro, como tanto tiempo has estado cotizando.
De todos modos, a igual base de cotización (sueldo percibido mientras se está activa laboralmente) y a igual de año cotizados, mismo salario que se percible por el Desempleo.
Espero habertelo aclarado, si es esto lo que dudabas, que tampoco estoy muy seguro.

.... mmmm ahora me explico el por qué de mi " pedazo" prestación por desempleo... así que es porque soy mujer???, claro porque además desempeñé trabajos " femeninos", bueno... Técnico Especialista en Ed Infantil, tiene un pase, pero.. ayudante de tienda????, la verdad que alucino con este País!!!
Si la prestación x desempleo, ya de por si, es una m...( perdón!), encima... NO seas mujer, porque entonces...

Qué fuuuuueeeeeeeeeeeeerteeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee!!!!!

Gracias por compartirlo Raúl!!

Gracias por la aclaración, Raúl. Sí, me refería a eso.
Un beso
Valle

esto es siempre asi, las peores paradas las mas debiles. es como en los conflictos, las catastrofes naturales, etc.

Hola a todas y a todos,

Mil gracias, Raúl, por colgar el artículo. Es bueno que todas y todos tengamos conciencia de la situación que tenemos. En cuanto a la explicación que has dado del desempleo es totalmente cierto lo que dices, se cobra en función de la base de cotización y por el tiempo trabajado, no por el sexo al que se pertenezca. También tienes razón al afirmar que las mujeres solemos trabajar en niveles menos cualificados y durante menos tiempo porque generalmente somos las cuidadoras de la sociedad (hij@, padres y madres, etc....). No obstante, creo que las nuevas generaciones de mujeres tienen mucho que hacer al respecto. Me refiero a que si trabajamos en trabajos menos cualificados, en la mayoría de los casos, es porque tenemos un nivel menor de formación y seguimos dando prioridad a otros aspectos (los familiares y sociales) antes que a los individuales y personales.
Las mujeres tenemos que ponernos las pilas y adquirir más formación y dar prioridad a nuestros proyectos personales. En mi trabajo, todas y todos los que tenemos el mismo nivel de formación, cobramos lo mismo.

Mi opinión es que tenemos que seguir luchando por la igualdad de las mujeres en todos los ámbitos y también debemos prepararnos y formarnos igual que lo hacen los hombres para llevar a cabo esta lucha.