TU VISITA SIN MIS IMPUESTOS
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TU VISITA SIN MIS IMPUESTOS
PONENCIA/PROPUESTA DE RESOLUCIÓN para los ENCUENTROS ESTATALES
Área de Asuntos religiosos y Área Joven de la FELGTB
TU VISITA SIN MIS IMPUESTOS
La presente ponencia/propuesta surge por la necesidad de un posicionamiento por parte de los colectivos LGTB ante una nueva visita del líder de la Jerarquía de la Iglesia católica a Madrid dentro del marco de un encuentro mundial de jóvenes.
La estructura jerárquica de la Iglesia católica es piramidal, machista y patriarcal. Impide a sus miembros manifestarse públicamente y disentir de ella, y transmite una ideología que sólo existe en el seno de esta estructura. Así, se encarga de adoctrinar y difundir sus propias ideas, en muchas ocasiones en contra de la libertad social. Es más, la intención de muchos jerarcas es la imposición de su doctrina represora a todo el conjunto de la sociedad, ya sea católica o no.
Los acuerdos del Concordato de 1979 entre la Iglesia y el Estado Español se aprobaron fuera del marco constitucional. Estos acuerdos otorgan una serie de privilegios a la Iglesia Católica Española que no respetan los principios de igualdad del pueblo español, de la misma forma que otros acuerdos posteriores.
La Iglesia Católica utiliza la declaración oficial de tributos a Hacienda para permitir que parte de los impuestos pagados vayan a sus arcas. Se ha presentado una campaña publicitaria en la que se muestra una inversión social que no existiría sin esa contribución, pero lo cierto es que la recaudación por ese medio únicamente da para mantener su estructura jerárquica. La acción social que desarrolla la financia por medio de la casilla de “otras acciones sociales”, a la que también concurre con el resto de organizaciones. ELPLURAL.com denunció en junio de 2008 que la Iglesia Católica recibía más de 5.000 millones al año de las administraciones públicas, estimando que la casilla del IRPF suponía un 20-25% de estos ingresos. Con la exención de impuestos de la Iglesia, el Estado ya dejaba de recaudar 750 millones. PÚBLICO denunció el 11 de enero de 2010 que esta cantidad ascendía a 6.000 millones, de los que sólo 241 son percibidos a través de esta casilla (un 5% del total). Los sindicatos, por ejemplo, según el diario La Razón (14 de mayo de 2010), perciben del Estado en torno a 220 millones al año.
La asignatura de religión en las escuelas es una herramienta que, es utilizada en ocasiones contra la propia igualdad de la sociedad, y en concreto contra las personas LGTB. ¿Qué pensará un adolescente LGTB que esté recibiendo estas enseñanzas contra sus propios sentimientos? Esta visión discriminadora ataca al propio sistema educativo español, contradiciendo la LOE (Ley Orgánica de Educación) en sus aspectos básicos como el respeto a la diversidad, incluida la diversidad familiar. La creación de la asignatura de educación para la ciudadanía ha sido contestada muy duramente, desprestigiando su solvencia por el mero hecho de hablar en un capítulo sobre diversidad familiar. Y ante todo esto, se intenta ocultar la lgtbfobia existente en las aulas por parte de la CONCAPA (Confederación Católica de Padres de Alumnos).
Dentro del sistema educativo existen otros privilegios otorgados a centros privados y concertados, en su gran mayoría católicos, en muchos casos haciendo un mal uso de la educación. También nos encontramos privilegios en otros centros públicos, como es el caso de la existencia en algunas universidades de lugares de culto exclusivamente católicos controlados por los obispados correspondientes.
Hemos tenido que escuchar declaraciones sin ningún fundamento justificando la ineficacia del preservativo e intentando engañar a la población. Igualmente, con todas estas afirmaciones surge una estigmatización hacia las personas seropositivas, consideradas víctimas de estos actos “contranatura”. Denunciamos su irresponsabilidad al condenar el uso del preservativo contribuyendo así tanto a la propagación del VIH/sida como de otras ITS cuando desde nuestras entidades trabajamos día a día por la prevención.
También tenemos que escuchar diariamente manifestaciones sobre la moral sexual condenando toda práctica fuera del matrimonio, así como la homosexualidad. Actualmente, la Conferencia Episcopal da un protagonismo absoluto a la condena y persecución de la moral sexual, convirtiéndolo en algo obsesivo, y muy por encima de la denuncia de problemas sociales acuciantes como la exclusión, la xenofobia, la crisis o el paro. Rechazamos la concepción machista y lgtbófoba de la sexualidad humana de la jerarquía católica y su triste y continua penalización de la diversidad afectivo- sexual.
Creemos que debemos volver a renovar nuestro compromiso por la independencia del Estado Español frente a cualquier confesión religiosa como principio básico para apostar por una sociedad plural. No es de recibo la existencia de un Concordato con el Vaticano que otorgue privilegios a la Iglesia Católica por encima de la voluntad de la ciudadanía, ni la prepotencia de la jerarquía católica conservadora que busca imponer su moral no sólo a sus feligreses, sino trasladarla a toda la sociedad como normas de conducta. La laicidad debe garantizar la libertad y la igualdad de todos los ciudadanos, desde la pluralidad y el respeto a la diferencia.
Del 16 al 21 de agosto va a tener lugar en Madrid la Jornada Mundial de la Juventud, un encuentro internacional en el que se estima que participarán más de 2 millones de jóvenes y en el que se incluirá la visita del Papa a nuestro país. Cómo han señalado los mismos dirigentes de la jerarquía católica, se trata de un encuentro eminentemente religioso y privado, por lo que el Sr. Ratzinger no acudirá como Jefe de Estado del Vaticano sino como líder de una religión.
El coste de esta visita, por lo tanto, no institucional, está estimado en 50 millones de euros, de los cuales alrededor de la mitad serán sufragados por las instituciones estatales y la otra parte será cubierta por grandes empresas colaboradoras (Telefónica, Iberia, El Corte Inglés...)
Además de colaborar en la financiación, el gobierno ha declarado la visita de “evento de interés especial” lo que significa que estas empresas “subvencionadoras” del evento contarán con beneficios fiscales. También se ha cedido gratuitamente el Palacio de Congresos del paseo de la Castellana que será sede del Centro de Prensa, el aeródromo de Cuatro Vientos constituido como sede principal junto con la Plaza de Cibeles del encuentro y por último el mismo Ayuntamiento de Madrid, lugar elegido para realizar la misa de bienvenida al Papa.
Defendemos un Estado laico que garantice la convivencia entre los ciudadanos y ciudadanas que profesan diferentes creencias, o ninguna creencia, y diferentes opciones morales. Esta laicidad debe ser trasladada a todas las entidades de la administración pública, desde Ayuntamientos hasta escuelas y hospitales, y por tanto estas instituciones no deben favorecer a ninguna confesión religiosa.
Por ello rechazamos la forma en que se va a realizar y financiar tanto la visita del Papa Benedicto XVI como la celebración de la Jornada Mundial de la Juventud que tendrá lugar este agosto en Madrid, porque España es un estado aconfesional y no debe privilegiar a ningún líder religioso ni promover o beneficiar a ninguna religión con dinero público. La única financiación pública que debe existir es la realizada como acción social, concurrida de forma libre y en igualdad de condiciones para todas y todos, y de la que la sociedad en su conjunto se vea beneficiada, independientemente de que las personas sean creyentes o no creyentes.
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La presente ponencia/propuesta surge por la necesidad de un posicionamiento por parte de los colectivos LGTB ante una nueva visita del líder de la Jerarquía de la Iglesia católica a Madrid dentro del marco de un encuentro mundial de jóvenes.
La estructura jerárquica de la Iglesia católica es piramidal, machista y patriarcal. Impide a sus miembros manifestarse públicamente y disentir de ella, y transmite una ideología que sólo existe en el seno de esta estructura. Así, se encarga de adoctrinar y difundir sus propias ideas, en muchas ocasiones en contra de la libertad social. Es más, la intención de muchos jerarcas es la imposición de su doctrina represora a todo el conjunto de la sociedad, ya sea católica o no.
Los acuerdos del Concordato de 1979 entre la Iglesia y el Estado Español se aprobaron fuera del marco constitucional. Estos acuerdos otorgan una serie de privilegios a la Iglesia Católica Española que no respetan los principios de igualdad del pueblo español, de la misma forma que otros acuerdos posteriores.
La Iglesia Católica utiliza la declaración oficial de tributos a Hacienda para permitir que parte de los impuestos pagados vayan a sus arcas. Se ha presentado una campaña publicitaria en la que se muestra una inversión social que no existiría sin esa contribución, pero lo cierto es que la recaudación por ese medio únicamente da para mantener su estructura jerárquica. La acción social que desarrolla la financia por medio de la casilla de “otras acciones sociales”, a la que también concurre con el resto de organizaciones. ELPLURAL.com denunció en junio de 2008 que la Iglesia Católica recibía más de 5.000 millones al año de las administraciones públicas, estimando que la casilla del IRPF suponía un 20-25% de estos ingresos. Con la exención de impuestos de la Iglesia, el Estado ya dejaba de recaudar 750 millones. PÚBLICO denunció el 11 de enero de 2010 que esta cantidad ascendía a 6.000 millones, de los que sólo 241 son percibidos a través de esta casilla (un 5% del total). Los sindicatos, por ejemplo, según el diario La Razón (14 de mayo de 2010), perciben del Estado en torno a 220 millones al año.
La asignatura de religión en las escuelas es una herramienta que, es utilizada en ocasiones contra la propia igualdad de la sociedad, y en concreto contra las personas LGTB. ¿Qué pensará un adolescente LGTB que esté recibiendo estas enseñanzas contra sus propios sentimientos? Esta visión discriminadora ataca al propio sistema educativo español, contradiciendo la LOE (Ley Orgánica de Educación) en sus aspectos básicos como el respeto a la diversidad, incluida la diversidad familiar. La creación de la asignatura de educación para la ciudadanía ha sido contestada muy duramente, desprestigiando su solvencia por el mero hecho de hablar en un capítulo sobre diversidad familiar. Y ante todo esto, se intenta ocultar la lgtbfobia existente en las aulas por parte de la CONCAPA (Confederación Católica de Padres de Alumnos).
Dentro del sistema educativo existen otros privilegios otorgados a centros privados y concertados, en su gran mayoría católicos, en muchos casos haciendo un mal uso de la educación. También nos encontramos privilegios en otros centros públicos, como es el caso de la existencia en algunas universidades de lugares de culto exclusivamente católicos controlados por los obispados correspondientes.
Hemos tenido que escuchar declaraciones sin ningún fundamento justificando la ineficacia del preservativo e intentando engañar a la población. Igualmente, con todas estas afirmaciones surge una estigmatización hacia las personas seropositivas, consideradas víctimas de estos actos “contranatura”. Denunciamos su irresponsabilidad al condenar el uso del preservativo contribuyendo así tanto a la propagación del VIH/sida como de otras ITS cuando desde nuestras entidades trabajamos día a día por la prevención.
También tenemos que escuchar diariamente manifestaciones sobre la moral sexual condenando toda práctica fuera del matrimonio, así como la homosexualidad. Actualmente, la Conferencia Episcopal da un protagonismo absoluto a la condena y persecución de la moral sexual, convirtiéndolo en algo obsesivo, y muy por encima de la denuncia de problemas sociales acuciantes como la exclusión, la xenofobia, la crisis o el paro. Rechazamos la concepción machista y lgtbófoba de la sexualidad humana de la jerarquía católica y su triste y continua penalización de la diversidad afectivo- sexual.
Creemos que debemos volver a renovar nuestro compromiso por la independencia del Estado Español frente a cualquier confesión religiosa como principio básico para apostar por una sociedad plural. No es de recibo la existencia de un Concordato con el Vaticano que otorgue privilegios a la Iglesia Católica por encima de la voluntad de la ciudadanía, ni la prepotencia de la jerarquía católica conservadora que busca imponer su moral no sólo a sus feligreses, sino trasladarla a toda la sociedad como normas de conducta. La laicidad debe garantizar la libertad y la igualdad de todos los ciudadanos, desde la pluralidad y el respeto a la diferencia.
Del 16 al 21 de agosto va a tener lugar en Madrid la Jornada Mundial de la Juventud, un encuentro internacional en el que se estima que participarán más de 2 millones de jóvenes y en el que se incluirá la visita del Papa a nuestro país. Cómo han señalado los mismos dirigentes de la jerarquía católica, se trata de un encuentro eminentemente religioso y privado, por lo que el Sr. Ratzinger no acudirá como Jefe de Estado del Vaticano sino como líder de una religión.
El coste de esta visita, por lo tanto, no institucional, está estimado en 50 millones de euros, de los cuales alrededor de la mitad serán sufragados por las instituciones estatales y la otra parte será cubierta por grandes empresas colaboradoras (Telefónica, Iberia, El Corte Inglés...)
Además de colaborar en la financiación, el gobierno ha declarado la visita de “evento de interés especial” lo que significa que estas empresas “subvencionadoras” del evento contarán con beneficios fiscales. También se ha cedido gratuitamente el Palacio de Congresos del paseo de la Castellana que será sede del Centro de Prensa, el aeródromo de Cuatro Vientos constituido como sede principal junto con la Plaza de Cibeles del encuentro y por último el mismo Ayuntamiento de Madrid, lugar elegido para realizar la misa de bienvenida al Papa.
Defendemos un Estado laico que garantice la convivencia entre los ciudadanos y ciudadanas que profesan diferentes creencias, o ninguna creencia, y diferentes opciones morales. Esta laicidad debe ser trasladada a todas las entidades de la administración pública, desde Ayuntamientos hasta escuelas y hospitales, y por tanto estas instituciones no deben favorecer a ninguna confesión religiosa.
Por ello rechazamos la forma en que se va a realizar y financiar tanto la visita del Papa Benedicto XVI como la celebración de la Jornada Mundial de la Juventud que tendrá lugar este agosto en Madrid, porque España es un estado aconfesional y no debe privilegiar a ningún líder religioso ni promover o beneficiar a ninguna religión con dinero público. La única financiación pública que debe existir es la realizada como acción social, concurrida de forma libre y en igualdad de condiciones para todas y todos, y de la que la sociedad en su conjunto se vea beneficiada, independientemente de que las personas sean creyentes o no creyentes.
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Re: TU VISITA SIN MIS IMPUESTOS
Qué hartura, qué indignación y qué vergüenza
anita- Mensajes : 1407
Fecha de inscripción : 23/06/2008
Localización : En Triana...
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